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Desmantelando la Derecha Interna


Autoexigencia=138

Cuando tengo un observador autoexigente, éste probablemente haya estado toda la vida susurrándome cosas del tipo: “te equivocaste, intenta hacerlo mejor, no, por ahí no, que vas a hacer el ridículo...” etc, y ese susurro, por supuesto, va acompañado de la CARGA que ofrece la perspectiva de ese juez interno que asocia ERROR=MALO.

Ese observador me crea un “Yo erróneo” que no es más que una idea con la que aprendo a identificarme, cuando en realidad, el único error a desmantelar es el propio pensamiento que dice que hay algo erróneo en mí, al CREADOR de ese “yo miserable”.

Pero ¿Quién es el Creador de ese “yo miserable”? Ese que susurra autoexigencia dentro de ti. Vamos a conocerle un poco más, pues solo Pillarle en su salsa lo empieza a desmantelar.

La duda que le entra a muchas personas antes de detectar a este observador susurrante como una distorsión ESENCIAL a desmantelar es: “¿y si tiene razón? ¿y si estoy haciendo algo equivocado y tengo que cambiar de dirección?” La respuesta es muy sencilla: no se trata de modificar tu dirección desde la carga y el apremio del observador de autoexigencia, de modo que, aunque tuviera razón, es preciso soltar completamente el enlace de obediencia que uno tiene enganchado a ese susurro de “responsabilidad”, de “orden”, de “perfección”, de “corrección”. Si el susurro viene con carga, es distorsión, de modo que ahí suelto. Si verdaderamente tiene algo genuino ese susurro, me vendrá después de soltarlo, una percepción mucho más amplia y SIN CARGA, en la que no hay ningún juicio por aquel error, sino que, muy por el contrario, el error, efectivamente, me ilumina.

Si hay dudas sobre a qué pensamientos hacer caso y a qué pensamientos no, es muy sencilla también esta respuesta: Todo pensamiento que viene con carga, es producto de un marcador. Da igual que sea miedo, inseguridad, deseo, necesidad..etc. Tengo que soltar el enlace, por tanto, con el EMISOR de la información que viene de una cadena distorsionada, pues tengamos en cuenta que el pensamiento que llega a mi 3, ha pasado por filtros de distorsión, de modo que tengo que quitarle esos filtros para poder ver la verdad que trae ese pensamiento.

¿Cómo le quito esos filtros?

En realidad no se los quito yo, pero puedo cooperar con el vacío empezando a detectar la falsedad de lo que llega a mi 3, la distorsión y la carga con que llega, me avisan de que ahí hay un marcador, por tanto, sencillamente no le doy más credibilidad, dejo que pase el tren lineal sin subirme en él, asumo la carga que deja a su paso, pues ahora ya, sin creer al contenido, me será mucho más fácil permitir que mi circuito sienta plenamente lo que el pensamiento traía consigo. Así voy dejando en punto cero a mi plano 2, listo como canal para que sea vehículo del propósito, en lugar de cárcel para el “yo erróneo” que, recordemos, es solo una idea de algo que creo ser, y no soy.

Ese observador que juzga mis propios pasos, tiene un potencial extraordinario: 

Juez=65

Tiene, como vemos, el potencial de la lógica en sus manos. Cuando este juez está interferido por la Ley de plano 4, decide lo que está bien y lo que está mal, en función de los SESGOS que hayan sido acumulados en plano 4. Detectarle, por tanto, como principal error a desmantelar para que me pueda permitir una observación sincera y genuina, nos permite que deje de actuar imponiendo cargas al desdoblado, y empiece a detectar potenciales.

Digamos que este Juez nos muestra la Derecha en distorsión. Es una Derecha que está siendo utilizada para señalarle los errores a mi izquierda desde la carga, en lugar de para bajar sus propios potenciales a través del intercambio de esa carga asumida, con el vacío. Si no lo detecto, -que eso pasa cuando estoy identificado con él, que no puedo verlo, sino que lo soy,- entonces me opera de forma INCONSCIENTE.

Así, probablemente con mi CONSCIENTE haré un ESFUERZO por contrarrestar el fuerte impulso de esta derecha inconsciente, que digamos, se comporta militarmente exigiéndome corrección. Mi consciente así, es muy probable que compense este esfuerzo con un esfuerzo similar contrario hacia la Izquierda. Es decir, utilizo mi Derecha para ser superexigente con mi Izquierda, para exigir mis derechos, para que no me tomen por tonto, para que el “rico” no se ponga por encima mío, para ser un valiente contestatario...etc; o bien, en su polaridad contraria, me quedaré lamentándome y quejándome de mi miserable destino (ambos observadores son el mismo observador visto desde el polo de la respuesta luchadora, o de la inacción quejumbrosa) Y así mi derecha y mi izquierda cooperan en distorsión para tener un resultado en la realidad.

Pero cuando puedo ver esta trama en mi inconsciente, veo cómo mi Derecha está operando de esta forma, entonces ahí, con solo VERLO, automáticamente se relaja, y cuanto más me detecto la autoexigencia, más se desmantela este Juez, más se desmantela mi derecha distorsionada. Pues si está siendo utilizada para juzgarme, como ya hemos dicho, no está siendo utilizada para detectar potenciales, de modo que me veo en la NECESIDAD, y desde ahí lucho por tapar esas necesidades, y con mi Izquierda le pido a la Derecha que baja potenciales y que me está validando la distorsión, que me provea de esas necesidades.

Sin embargo, cuando puedo ver todo este cuadro dentro de mí, lo que estoy haciendo con mi Derecha es liberarla de la distorsión de la autoexigencia, de la búsqueda de corrección moral...etc.

Si ven en la Derecha, podemos ver muy claro a aquellos que se sitúan en el extremo, mucho más cerca del 5 plano, en los que no tienen esta autoexigencia moral, sino que simplmente ven potenciales, y los bajan para su propio beneficio personal, mientras imponen las normas "morales" a los que les necesitan para que "repartan" los beneficios que obtienen de esos potenciales. Otra parte de la derecha nos muestra también la autoexigencia moral, la que está más cerca de 4.

VER todo este juego dentro de uno, es libertad. Ver a los jugadores ahí fuera, y validar la distorsión a través de validar mi opinión acerca de ellos, es mantener el velo.

Así que, cuando puedo ver a mi Derecha en distorsión, exigirle perfección a mi izquierda, que valida así la existencia de un “yo erróneo”, necesitado, carente, luchador, esforzado...etc., entonces ahí SÍ puedo empezar a ser absolutamente honesto en mi observación, no antes, pues si tengo un juez activo en distorsión, me voy a sentir mal por detectarme en el ERROR, de modo que no lo desmantelo. Así, el encuentro con este observador y detectarlo como el primer error a desmantelar, me ofrece el extraordinario potencial de la honestidad conmigo mismo, que me ejerce de gps veloz que capta mis marcadores sin que haya detrás de este ver, ningún observador encima abrochando e impidiendo su desmantelación, a través de un juicio.

Curiosamente, en España tenemos al Dictador Francisco Franco, que nos muestra muy bien esa Derecha en 4 exigente, férrea, moral...etc. Ahora, desde la Lógica podemos ver que, detectar al Franco interno, nos abre el potencial de SER FRANCOS, honestos, con nosotros mismos, lo cual no tiene precio. Si en lugar detectarlo, lo SOY, entonces no me doy cuenta y voy a ir hacia fuera a exigirle a otros lo que me exijo a mí mismo, voy a operar inconscientemente con mi derecha, y conscientemente soy un defensor de la izquierda. Pero el impulso, la energía y la lógica con la que opero, es una derecha en distorsión, que no está siendo utilizada para su verdadero rol de convergencia.

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